Antes persona que tú.

Muchas veces me he preguntado: ¿quién soy? Y mí respuesta ha sido todavía lo estoy averiguando. Hasta hoy quizás no me he dado cuenta que era una maldita escusa. Des de la ventana miro la tormenta, no me da miedo, no mucho por lo menos. Y en esta imagen tan escalofriante de mí es cuando me doy cuenta de quién soy. Miles de pensamientos, recuerdos, decisiones y sentimientos se juntan y me machacan. Me lo dicen, alto y claro. Me ponen en frente lo que yo he querido eludir y es inevitable no mirar, porque es como si un espectador no mirase un telón, o al igual que es imposible no oír los truenos de esta tormenta de verano.Además la lluvia cae despacio des de el cielo, una gota tras otra, sin prisa. Parecen miles de pasos en mi dirección, quizás comience a tener miedo, a sentirme sola. Pongo la mente en blanco, como si me sumergiera. No oigo nada. No veo nada. Y luego pienso, recuerdo. Palabras egoístas, miradas doloridas. cuerpos agotados, personas cansadas y yo en medio desubicada.

Son las 3.31, a les 8.45 va a sonar el despertador.